TENGO UNA SONRISA

En su sonrisa todos mis miedos se durmieron y con sus manos la calma me abrazó. ¿Qué importa el posible final teniendo semejante principio?

Y de repente, en medio de la soledad, llega alguien con una luz, y se queda ahí, a tu lado; ya importa menos lo oscuro que está. Al final uno se queda con aquello que le da sentido al momento.

Aunque la distancia nos suelte de la mano, mientras tengamos a alguien en nuestro corazón, no estaremos solos; el amor se siente precisamente con el corazón. Paciencia y silencio, aprendemos de todo y de todos; el tiempo nos permitirá soltar y seguir …

A veces uno se siente como un manantial entre las piedras, otras como un árbol solitario con las últimas hojas. Cuando la ayuda recibida es desinteresada, su  efecto es todavía mayor.

¡TENGO UNA SONRISA LISTA PARA CUANDO TE VEA!